LOS NUEVE CENTROS

La inteligencia de los seres de siete centros que utilizaba el miedo como motivador principal para controlar el mundo, paso a los seres de nueve centros que no estamos aquí para vivir temiendo por nuestra supervivencia. Cada uno de nosotros puede transitar su camino evolutivo hacia la conciencia. Solo tenemos que soltar el condicionamiento de nuestras mentes por mitos, cuentos, y películas, tenemos que atrevernos a ser nosotros mismos en vez de darle poder a los demás.

Los nueve centros, son núcleos de energía que transforman la fuerza vital. Cada centro tiene una correlación biológica.

Así la garganta es el centro de manifestación, toda la energía se está moviendo por los otros ocho centros hacia la garganta. Es la manera en que expresamos con precisión lo que significa un ser humano diferenciado en la cumbre de la cadena alimentaria.

Dos centros de presión: los centros de la ocho, cabeza y de la raíz, mueven la energía hacía los tres centros de conciencia. Son las presiones del saber y el hacer, de pensar y de seguir vivo.

Los tres centros de conciencia: El bazo, Ajna, y  Plexo Solar, son tres áreas potenciales de auto conciencia, cada una de ellas se enfoca e interpreta nuestras experiencias vitales como conciencia del cuerpo, de la mente o del espíritu (los otros seis centros funcionan a nivel mecánico).Al llegar a la garganta, la energía se convierte en expresión de nuestra inteligencia consciente o inteligencia esplénica del Bazo(conciencia para la supervivencia o inteligencia mental o inteligencia emocional o del espíritu.

Los cuatro centros motores (de energía) son los centros de la Raíz, Del Plexo Solar, Sacral y del Corazón son motores que nos proporcionan los recursos de energía necesarios para manifestar nuestra vida. La raíz nos da impulso para continuar. La ola emocional del Plexo solar nos provee del deseo de más experiencias, de intimidad y de la conciencia del espíritu. En el Sacral tenemos la energía creativa. El Corazón es el motor de voluntad y del “yo”. Asegura nuestra supervivencia en el plano material a través de jerarquías.

Un centro de Identidad: El centro G, es donde reside el Monopolo Magnético. Situado estratégicamente en el Centro Gráfico del Mándala, establece nuestra identidad como dirección a través del tiempo en el espacio, que llamamos nuestra geometría.

Ahí es donde nuestro flujo de energía único nos conecta con el flujo de toda la vida y el Universo. El Monopolo Magnético nos va trayendo nuestra vida. Podríamos decir que el Universo vive la vida a través de nosotros.